Educación Física vs Gimnasia

Como bien sabemos todos/as, en los colegios en particular y en la calle en general, el área de Educación Física es conocida por la mayoría de las personas como "la gimnasia", y esto me lleva a una serie de cuestiones:

- ¿Por qué no conocemos al área de Lengua como lectura?
- ¿Por qué no conocemos al área de Matemáticas como cuentas?

- ¿Por qué no conocemos al área de Conocimiento del Medio como mapas?

- ¿Por qué no conocemos al área de Plástica como colorear?

- ¿Por qué no conocemos al área de Música como flauta?

- ¿Por qué no conocemos al área de Inglés como lectura inglesa?

- ¿Por qué no conocemos al área de Religión como rezar?

Pues la respuesta a estas cuestiones es muy simple, porque la lectura es sólo una parte del área de Lengua, las cuentas es sólo una parte del área de Matemáticas, los mapas es sólo una parte del área de Conocimiento del Medio, el colorear es sólo una parte del área de Plastica, el tocar la flauta es sólo una parte del área de Música, el leer textos en inglés es sólo una parte del área de Inglés, y el aprender rezos es sólo una parte del área de Religión.

Esto mismo sucede con la Educación Física, en la que la gimnasia es sólo una parte de ella, junto a los elementos psicomotores básicos, las cualidades motoras coordinativas, las habilidades básicas, genéricas y específicas, las capacidades físicas básicas, los juegos populares, los juegos cooperativos, los deportes, la expresión corporal, etc.

Así pues, dejemos de desprestigiar al área de Educación Física llamándole "la gimnasia", y démosle la importancia que merece, es decir, como un área más de la etapa de Primaria, que contribuye al desarrollo de las competencias básicas, y lo que es más importante, que colabora a que alumnos y alumnas sientan gusto por la actividad física, propiciando que la lleven a la práctica en su tiempo libre, y así contribuir a combatir una de las epidemias del siglo XXI, que casualmente en Andalucía es en el lugar de Europa en el que mayor presencia está teniendo, como es la obesidad.

Y recordar una cosa, los primeros en darles importancia y llamarla por su nombre, debemos ser los/as propios/as docentes.